miércoles, 27 de abril de 2011

“Mientras exista la miseria humana y la capacidad de reírse, habrá Torrente para rato”


Durante el estreno de la cuarta película del popular detective español, el actor estuvo en Buenos Aires y charló en exclusiva para La Vereda.

Para aquellos desprevenidos que aún no lo conozcan, José Luis Torrente es la personificación en vida del antihéroe tradicional. Es un detective retirado, corrupto, proxeneta, homofóbico, racista y ebrio. O sea, un cóctel que no cualquiera podría digerir ni siquiera en la pantalla grande. Pero a costa del pensamiento del común de la gente, esta película personificada por Santiago Segura no solo fue un verdadero éxito sino que también se convirtió en la cinta más taquillera en España y ahora, para su cuarta entrega, también se erigió como el primer film en 3 dimensiones de la pantalla grande ibérica.
Para sustentar tamaño éxito, Segura viajó a nuestro país y dio una serie de entrevistas explicando los pormenores de una cinta que no solo lo tiene como actor principal sino que también aparece en los créditos como guionista y director. La Vereda fue uno de esos pocos medios que tuvo acceso a una charla exclusiva con él y pudimos apreciar como la saga Torrente vuelve más eficiente que nunca.
Esta película es histórica por dos motivos: ser la más taquillera y convertirse en la primera en ser filmada en 3D para España, ¿esperabas tal repercusión?
En realidad nunca pensé en hacer cine histórico y por su parte el 3D le brinda un aporte retrogrado y primitivo a lo que es el personaje de Torrente. La función principal es que haga reír al espectador, más allá del 3D. Reconozco que ha sido un trabajo duro, pero estoy conforme con el resultado final.
Desde la primera pregunta se nota que Santiago Segura es una persona amable, predispuesto a la charla y con un sentido del humor envidiable, tal vez todo lo contrario al personaje que interpretó en 4 ocasiones. Pregunta sobre personajes como Palito Ortega, Diego Capusotto e incluso menciona a Independiente como ejemplo de lo que sería aquí el Atlético Madrid español. Eso sí, se sorprendió un poco al ser consultado sobre una futura adaptación de su personaje en otras tierras.
¿Cómo te toma la intención de Hollywood de llevar al cine americano una versión de Torrente? (NdR: ya se menciona el nombre de Sasha Baron Cohen, actor de Borat, como posible detective)
Me pone muy cachondo solo de pensarlo (risas). El hecho de venderles algo a ellos después de todas las cosas que nos metieron a nosotros durante décadas me gusta, aunque después el producto final no represente una copia fiel. Pero me causa gracia solo de pensarlo e incluso me gusta mucho la idea de Sasha Baron Cohen. Creo que Borat es una película totalmente “torrentiana”.
¿Te sumarías al proyecto si finalmente se...?
(Interrumpe exaltado) Iría corriendo, para ser de lo que fuere...de villano, cualquier cosa. Quiero estar en el Torrente americano por supuesto.
En cada una de las películas de Torrente aparecen famosos, como deportistas de la talla de Casillas, Cesc Fábregas, Gonzalo Higuaín o Sergio Agüero o el cantante David Bisbal, ¿de donde nacen estos contactos?
Vivo un poco para el “amiguetismo”. Desde siempre he creído en eso, por eso llamo a los que creo que tienen mi mismo sentido del humor, incluso si no los conozco, como fue el caso de Higuaín o Agüero. Por otro lado hay una escena excelente en la que participa Carmen Martínez de Bordiú que es la mismísima nieta del General Francisco Franco (NdR: Dictador español durante 1936-1975) o Kiko Rivera, el hijo de Isabel Pantoja. En él he visto al ayudante ideal de Torrente, cuando cualquier persona en su sano juicio haría lo contrario, pero yo no. Yo hago pruebas, que actúen medianamente, insisto para que tengan cierta naturalidad frente a la cámara para que puedan llevar adelante mi fantasía. En el caso de los futbolistas ha sido más difícil porque no es mi círculo. Los he conocido mediante amigos que les divierte la película y descubrí tanto con el Kun (Agüero) como con Pipita (Higuaín) personas encantadoras, que vinieron por amor al arte y se han divertido mucho participando de la película.
¿Ves en Torrente a un personaje de culto?
Me sorprende que sea de culto siendo yo un inculto. Lo digo en broma, porque he leído...por lo menos 5 o 6 libros, que no he llegado a terminar (risas). Me gusta que sea de culto; hago un parámetro con lo que es “Piratas del Caribe”, donde hacen lo que quieren con un presupuesto de 180 millones de dólares. Pero eso se les va de las manos en el momento en que mucha gente comienza a opinar y aparecen 15 directivos de saco y corbata que preguntan y luego reforman y no te enteras de los cambios finales y es todo muy confuso. En cambio mi película podrá ser muy idiota, pero es mí película.
¿Estás pensando en una posible quinta película de Torrente?
No soy vidente pero sí soy una persona muy servicial que se debe a su público y sí estoy pensando en una quinta. Existen dos cosas que realmente deseo: la felicidad del espectador y que crezca mi cuenta corriente (risas), si ambas cosas se hacen realidad...todos seremos muy felices. Igualmente no la veo en un futuro cercano, necesito tener un cúmulo de ideas necesarias, calcula que de Torrente 3 a la 4 han pasado 6 años, soy reflexivo pese a mi aspecto.
¿Cómo era tu vida artística antes de ponerte el traje del detective?
Era miserable y no ha cambiado. Hablando seriamente, era la vida de alguien que ama el cine y le dieron la oportunidad de tener un juguete grande para jugar como quisiera. Hasta la llegada de Torrente solo había escrito cortometrajes y luego si llegaron las 4 películas, lo que habla a las claras de mi originalidad.
¿Cuál es el origen del vestuario del personaje?
Torrente jamás cambia de ropa en las 4 películas, esa fue una idea que tuve para darle más autenticidad al personaje. Algo así como el uniforme del súper héroe. La idea original nace de la serie “Miami Vice” (NdR: conocida en Argentina como “División Miami”). Era la ropa de Don Johnson...pero a la vista de Torrente.
¿Qué cosas del cine argentino te gustan?
Creo que Juan José Campanella aun no ha hecho una película mala. El gran problema es que las distribuidoras no acercan demasiado cine argentino a España y viceversa, es algo que debería mejorar, haber una mayor conexión. Me han hablado maravillas de “Esperando la Carroza” y a España no ha llegado porque se editan una o dos películas al año. Tampoco conocía a Diego Capusotto y cuando lo busqué en Internet quedé fascinado durante 3 horas.
Supiste cosechar un público especial gracias a trabajos como “El Día de la Bestia o Isi/Disi. ¿Apuntas a ese público a la hora de escribir o la idea es buscar mayor masividad?
Creo que mis seguidores tienen un humor similar, y el público de Torrente en España es variado, desde señoras de 80 años a chavales de 15 y a veces no lo entiendo, ¿sabes? Yo hago el cine que me gustaría ver a mí y a mis amigos.
¿Qué le dirías a un aspirante de policía que te cruza por la calle y te dice “mi idea es ser algún día como Torrente?
Le diría “buenos días, hasta luego” (risas). Hay veces que me cruzo con gente de lo más extraña y trato de salir de esas situaciones de la mejor manera posible.

¿Cuáles han sido las dificultades de trabajar en 3D?
Lo principal es que se incrementa el presupuesto y el tiempo de rodaje en un 30 por ciento. Luego, y al ser un producto nuevo en España, debimos trabajar mucho con el calibrado de las cámaras. Verás, se dedica una para el ojo izquierdo y otra para el derecho, y ambas deben estar perfectas. Al menor indicio de error el costo de post producción se incrementa enormemente y eso me hacía pensar “¿por qué grabo una película de esta manera?”, pero luego al ver el resultado...tenía mi respuesta. Incluso desde el público, que la ha visto en un mayor porcentaje en 3D. Eso sí, lo advierto ahora: todos los que sean bizcos o tengan mal el ojo no pueden ver 3D, ellos tienen permiso para bajársela de Internet (risas).
¿Existe un ranking personal de las películas de Torrente?
Sí, lo hay. Y lejos de hacer demagogia la 4 es la mejor (risas). En verdad, no. Es como los hijos, por ahí te preguntan “a ver, puntúalos del 1 al 10” y dices “bueno, este que tiene cara de tonto con gafas y la cabeza de soplillo...pero no, los queremos igual, son hijos nuestros”. Sinceramente he sufrido haciendo cada una de las películas de Torrente y disfruté del resultado de todas así que sería como un padre ingrato si eligiera una sola.
Santiago, en definitiva, mientras coexistan la miseria humana y la capacidad de reírse de uno mismo, ¿habrá Torrente para rato?
¡Si! Y a eso podemos sumarle que el público lo pida...

Arquitecto Cervecero


Fue el elegido para lidiar con la difícil tarea de mantener a Quilmes en Primera División pero además es uno de los personajes más carismáticos del fútbol criollo. Bienvenidos a su mundo.

El centro porteño es un caos, nada fuera de lo normal para un viernes de horario pico y previo a un fin de semana largo. Bocinazos, entredichos, mezcla de oficinistas raudos por volver a casa con inminentes trasnochadores a punto caramelo. En el medio de todo eso y en plena vereda del hotel donde concentra el equipo cervecero está el, mirando todo con una paz envidiable, lejos de las locuras y desesperaciones que le esperan cada fin de semana en el corralito de cal, su lugar en mundo.
¿Cómo estás Ricardo?
Bien, adaptado al plantel totalmente pero con la desesperación lógica que arroja la situación y el poco tiempo que nos queda por delante. En este lapso busco que el equipo responda, cosa que lo viene haciendo aunque no tuvimos la suerte necesaria de que los resultados nos acompañaran. Creo que solo un punto en estas fechas es demasiado poco, pero soy consciente que he metido la cabeza dentro del león.
¿Es el desafío más importante como entrenador teniendo en cuenta el factor tiempo?
Si, no tengo dudas. Estamos muy apretados y hay mucha juventud en el plantel, pero confío en ellos y también sé que los puntos que tenemos no reflejan la realidad de lo hecho en los partidos que jugamos pero esto es fútbol y sabemos que a veces no se logra la suerte necesaria pero a la larga Dios recompensa las cosas que se hacen bien y esperamos llegar a las últimas fechas con confianza y si hay que morir, hacerlo de pie.
¿Cómo se trabaja con un jugador bajoneado no solo por los resultados, sino también por la situación en el campeonato?
Trato de no tocarles el tema ante jugadas poco comunes del partido. A veces los goles que nos convierten son fatalidades, como los que hizo Huracán con rebotes fortuitos para el rival y dos claros off-side. Por eso, no se puede decirles nada porque creo que si se le habla de jugadas puntuales se daña al jugador. Ante los errores, el mejor aliciente es confirmar al protagonista para el próximo partido, para que no caiga su confianza.
¿Existe la posibilidad de empezar un nuevo proyecto en el ascenso si el final no es el buscado?
Es posible. Pero no es lo mismo armar un plantel para la B que para Primera. Desde hace varios años que trabajo con equipos de la máxima categoría y quizá volver ahora al ascenso no sería fácil, pero creo que por ahora no tengo tiempo de pensar en eso ahora. Primero queremos zafar de esto, después te digo (risas).
¿Qué sensación te causa ver equipos formados casi en su totalidad por vos como Tigre, Argentinos, Newell´s o Racing?
Realmente me pone muy contento. Se ha dejado una base y quiero que les vaya bien, pero a veces el tiempo es tirano y no me lo doy ni yo mismo. Si me hubiera quedado en Racing hoy estaría bárbaro, pero empatamos 4 de 5 partidos y eso no me servía. Uno tiene que seguir trabajando, no hacerse tantos problemas.
¿Consumís mucho fútbol?
Antes era más enfermito. Ahora paré un poco porque con el tema del descenso a uno le hace mal a veces, aunque miro partidos para conocer rivales y saber a quién vamos a enfrentar. No es malo verlos, se puede aprender cosas.

¿Te afectó a nivel salud el hecho de llegar a equipos que siempre comienzan con la soga al cuello?
A veces tanto nerviosismo me ha pasado factura, más allá de los clásicos dolores de cabeza o afonía. Hubo partidos en los cuales terminé literalmente hecho pelota (risas). De por sí que vivo los partidos a full, medio trastornado. El fútbol me ha dejado secuelas pero es el oficio que elegí y no me puedo quejar. Todos sabemos que esto deja más tristezas que alegrías.

A medida que pasan los minutos y las preguntas, Ricardo se suelta aún más. No es un típico personaje del fútbol, con el cassette incorporado. Justamente eso le ha brindado la posibilidad de ser amado u odiado dentro del ambiente, pero jamás pasado por alto.
“Tal vez una de las mayores alegrías que tengo es la de ir por la calle y recibir tantas muestras de cariño. Noto que la gente me aprecia y eso te marca porque es señal que uno excede la figura de un entrenador y pasa a ser una persona querible”.
Más allá de eso, la vida profesional del entrenador cervecero tuvo sus cosas duras, que trascendieron lo deportivo. Tal fue el caso del incidente mediático que protagonizó con el jugador colombiano Juan Angulo, quien lo acusara de pedirle dinero a su representante para que éste participara en la primera de Tigre, equipo dirigido por Caruso en ese momento. “En un momento me calenté demasiado, pero como en ningún momento los tres empresarios que representaban al jugador respondieron las cartas documento que envié...me quedé tranquilo. Desaparecieron todos, incluso el jugador me admitió que un periodista lo instigó a decir lo que dijo en ese momento. Hay periodistas que son buenos y otros, malos. Hacen mal, escarban para poder escalar peldaños, caso Joselito Amado o Juan Cortese (NdR: Radio La Red y TyC Sports, respectivamente). Usaron mi nombre para tapar otras cosas que por desgracia se taparon y lamentablemente quedé sucio en algo que no tuve nada que ver. Yo no puse al jugador porque de los 4 meses que estuvo con nosotros, 3 los pasó desgarrado y hoy lo mandaron a China. Por suerte estoy tranquilo y sé que todo en la vida se paga y ellos la van a pagar”.

“Iniesta y Messi son buenos jugadores...pero que vengan a la cancha de All Boys”

Fiel a su estilo, Caruso charló sobre el nivel del fútbol actual, tanto en los estadios argentinos como en el extranjero.
“Veo un torneo mediocre, de chispazos. A veces aparece Estudiantes, otras Vélez o Racing, que tiene sus momentos. Pero ninguno me vuelve loco, no estoy pendiente de ellos, solo me fijo en Quilmes, salvo cundo los enfrentamos. Cuando nosotros damos dos pases seguidos, ahí si me pongo contento” (risas).
¿A nivel internacional te identificas más con un Mourinho (DT del Inter italiano) o Guardiola (entrenador del Barcelona)?
Sinceramente me dan lo mismo. Lo de Mourinho consiste en poner 11 tipos atrás y listo, no hay que mirar mucho. Y Guardiola, con los jugadores que tiene...pasa también que el Barcelona juega solo... ¡a los rivales les hacen siempre la misma jugada y se la comen!, además los arqueros parecen astronautas, se tiran al revés. Sé que Iniesta y Messi son buenos jugadores, sin ninguna duda, pero que vengan a la cancha de All Boys o la de Tigre, como siempre digo, a ver si pueden jugar ahí, no es tan fácil para ellos. En el fútbol español, entre los rivales que son bastante pobres y las canchas que son más grandes...

¿Los técnicos tienen anhelos parecidos a los futbolistas, el deseo de ir a un equipo grande de Europa, la Selección...?
Particularmente, no. No tengo la desesperación de agarrar equipos, lo que tuve que hacer lo hice. Me tocó en el ascenso, clubes de primera, grandes, cosa que nunca hubiera imaginado y llegué. ¿Boca? ¿River? ¿La Selección?, no tengo más nada para descubrir. Simplemente dirijo porque me gusta y me da placer, por el trabajo y las necesidades obvias, aunque reconozco que en este último tiempo me dieron ganas de largar todo, pero bueno, siempre los clubes te buscan pero ya nada me mueve un pelo. Eso sí, cuando agarro, quiero salvar al que me contrata.

Cuando la charla amenaza con seguir y los minutos vuelan llega la hora de la cena, Caruso, siempre amable, se levanta y empieza su retorno al búnker cervecero. No sin antes hacer una promesa que evite que Quilmes descienda. “Queda registrado en La Vereda. Si nos salvamos sale un auto para cada uno. Eso sí, habrá que hablar con las concesionarias para que nos regalen algunos” y partió con el sueño a cuestas, como el de todos los hinchas cerveceros.

Hombre de Blues

Es uno de los exponentes que revalorizan la imagen de “Héroe de la Guitarra” nacional. Dueño de un talento único, Juan Antonio Ferreyra, JAF, le pone rock and roll a La Vereda.



Con la misma fuerza que utiliza para tocar su guitarra, JAF devuelve una pelota imposible para ganar un partido aguerrido de paleta en el club de toda su vida. Allí, en La Paternal, está el, olvidándose por unos instantes del frenesí y la locura de la cotidianeidad porteña. “Esto me desenchufa, es mi momento de libertad, además estoy con mis amigos de toda la vida” nos dice apenas termina el encuentro que por cierto, terminó en victoria.
“El que pasó fue un buen año, hubo varios conciertos, además estuve preparando una placa que saldrá próximamente” señala el músico, explicando su balance de 2010. Igualmente lo que entusiasma más a JAF es su reciente proyecto, “Salida de Emergencia” un lugar que abrirá para que “los chicos, de forma organizada vengan temprano, se anoten y toquen. Traigan sus instrumentos, guitarras, bajos, palillos, todo. Yo estaré sobre el escenario, acompañándolos. Pero siempre de forma organizada y temprano, para que se diviertan y crezcan musicalmente” y enseguida remarca “guita cero. Es un servicio, no un negocio. Y un agradecimiento a todas esas personas que vienen a mis conciertos y ahora traen a sus pibes; para mi será una posibilidad de devolverle a mis fanáticos lo que ellos me dan a mi: la oportunidad de ser un profesional”.
¿Cómo encaras el 2011?
He firmado contrato con una compañía nueva, llamada Del Angel Feg, por dos discos. Si bien cuentan con artistas de primer nivel, de la talla de Charly García y Luciano Pereyra, hace ya 16 años que me manejo en forma independiente y con un perfil súper bajo, casi alejado de la pantalla o las radios. Hay buenas expectativas, uno de esos discos será en vivo, grabado en octubre del año pasado y contendrá un DVD. Lo que espero es que tenga la promoción necesaria, porque el nivel económico actual no es el mejor y la gente no tiene tanto dinero como para gastar en rock.
La última placa grabada en estudio por JAF se remonta al año 2009, con Supercharger, que contenía clásicos de su carrera, reversionados por el artista, pero lo curioso en este caso fue la distribución, a través de Internet, por el sello Don´t Pay Music.
¿Como fue la experiencia de distribuir tu música a través de un formato Online?
Ha sido una situación bastante atípica. Esto es simple, si uno no está en la televisión, no existe la posibilidad de hacer promoción, pero es algo que estuvo armado desde siempre. Son 10 empresas que manejan todo y para alguien como yo, que se maneja en forma independiente es muy duro.
¿Cuál es el beneficio de encargarse de absolutamente todo lo relacionado a tu música?
Hay algo maravilloso: yo no tengo jefe ni tengo que pedirle permiso a nadie. Hago lo que quiero yo y eso me da la tranquilidad para elegir el paso que debo dar, haciéndome cargo de los éxitos o los fracasos.
Si una compañía altera esa tranquilidad e invierte en un disco de tu catalogo para reeditar ¿Cual sería?
Elegiría dos: Diapositivas y Salida de Emergencia (NdR: editados por Sony/BMG en 1990 y 1991, respectivamente). No tengo dudas que si saldrían al mercado el día de hoy venderían no menos de 100.000 copias, mínimo. Sinceramente, no sé porque no lo hacen. Son dueños de la música y no les interesa difundirla. Hoy las grandes compañías tienen participación en las ganancias de los recitales de sus artistas, cosa que jamás había pasado anteriormente. ¡Una cosa de locos! Y no es solo de acá. A John Fogerty (NdR: líder originario de Creedence Clearwater Revival), que para mí está al mismo nivel que Paul McCartney, Mick Jagger o Keith Richards, estuvo parado muchos años porque no le dejaban tocar sus propios temas. Mismo a George Michael, a quien tuvieron 8 años parado por el simple hecho de haber firmado un contrato. Es simple, el músico quiere tocar y la compañía vender plásticos.
El hecho de ser un artista independiente le otorga a Juan Antonio Ferreyra la posibilidad de elegir la modalidad de sus conciertos. En algún momento puede presentarse solo, acompañado únicamente de su guitarra o bien con su trío, que completan Pablo Santos en bajo y Beto Topini en batería. Esto genera diferentes tipos de clima en la audiencia como así también en el músico.
¿Existe alguna preferencia de tu parte a la hora de tocar solo o con tu banda?
Me encantan las dos formas, porque son expresiones totalmente distintas. Cuando toco solo, puedo interpretar canciones que con la banda, al sonar tan fuerte, no podemos tocar y viceversa. Las dos opciones son grandiosas, porque me comunico de manera distinta con la gente, siempre siendo yo mismo.
Solo en el escenario soles explicar los acordes y las afinaciones de las canciones ¿Aparece un rol docente en esta modalidad?
No, es algo que hago siempre y sale como un chiste. Sin embargo, sé que puede resultar útil para un joven que esté presente y al terminar el concierto corra a su casa, conecte los equipos y le busque la vuelta. De esa manera se va a acordar de mí siempre, toda su vida.
¿Como definís a tu banda?
Son grandes amigos y excelentes instrumentistas. Prácticamente no tenemos la necesidad de ensayar porque nos conocemos de memoria tanto con Beto (Topini) como con Pablo (Santos). Me sorprenden y eso no es fácil. Son 30 años ya de conocernos y eso se traduce en una alegría inmensa sobre el escenario.
Al tener tanta cantidad de canciones, ¿se hace difícil armar una lista de temas para un concierto?
Elijo tocar fuerte, potenciando este formato que tenemos de trío. Dentro de esa idea suena Rock and roll, Rhythm and Blues y Blues y de ahí armamos las listas. De a poco incorporaremos baladas, con la participación de otros instrumentos para bajar un poco el volumen y hacer un pequeño segmento acústico. Eso sí lo estamos ensayando (risas).
Exclusivamente como guitarrista. ¿Notas la ausencia del músico virtuoso, como en aquellas bandas de los años 70?
Sinceramente no sé que hay hoy. Creo que al irse Pappo hay una gran falta de héroes de la guitarra, solo queda Walter Giardino con su enorme Rata Blanca, pero no tocan muy seguido acá y no tienen por eso una presencia fuerte. Por mi parte, al no tener apoyo de producción, no podría demostrar lo que realmente puedo hacer. ¡Ojala tuviera unos cuantos equipos Marshall, más algunos Ampeg y la batería amplificada como yo quiero como para demostrar que puedo hacer un buen papel en cualquier estadio! Es la oportunidad que cualquier artista pretende y tiene que saber aprovechar. En el mientras tanto, seguiré potenciando esta nueva banda que está lista para dar pelea donde sea.

La generación mediática en la televisión actual


Durante años hemos sido testigos de un debate constante, ¿es realmente buena la televisión argentina? ¿Ofrece en su abanico de posibilidades opciones para toda la familia a la hora de reunirse frente al televisor o bien para acompañar durante unos minutos a un simple espectador? Obviamente la respuesta nos dejará varios matices para analizar y algunos otros que, en fin, agrandarán aún más esas dudas que tenemos.

Comenzada la década de los 90, corrían en nuestro país una serie de nuevas tendencias que al día de hoy continúan vigentes. Mientras que en el mundo caían el Muro de Berlín y la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) e Irak invadía Kuwait, todo entre el auge de la música Grunge, con Nirvana a la cabeza y los dinosaurios que Steven Spielberg adaptó para la pantalla grande en Jurassic Park, en nuestro país también se establecían cambios. Los más importantes, desde la política, adoptando un modelo económico impuesto por el ministro Domingo Cavallo, bajo la presidencia de Carlos Menem y la sanción de la Ley de Convertibilidad. Presenciábamos el nacimiento de Puerto Madero y todo su glamour y elegíamos Miami para ir de vacaciones en lugar de San Clemente.
En la tele comenzaba a dar sus primeros pasos un tal Marcelo Tinelli, en un horario que aún no se terminaba de explotar como lo era la medianoche, Telefé le devolvía a los grandes la posibilidad de volver a reírse con los dibujos animados junto a Los Simpsons y las compañías de videocable aparecían y nos daban la opción de ver series norteamericanas exitosas como Seinfield, Friends, los Expedientes X y La Niñera.
Entre todo este compendio televisivo también se asomaban programas de “chimentos” de la farándula. Lucho Avilés y Jorge Rial, por ejemplo, nos contaban las intimidades de los famosos de la década y en ese momento comenzó el cambio en la preferencia de la gente. Ya no se elige la “novela de las 3 de la tarde” ahora veíamos a Lucho...
Más acá en el tiempo, este tipo de programas invade la televisión casera excediendo por completo sus horarios habituales y a su vez, creó subgéneros y una “selecta” clase de famosos y celebridades que se pasean por la mayor cantidad de canales posibles.
“Uno es famoso las 24 horas. Trabaja de famoso” sostiene Anabela Ascar, conductora de unos de los programas más bizarros de la actualidad, en Crónica TV.
En el medio de todo esto, Alejandro Seselovsky, periodista y redactor de la revista Rolling Stone y columnista del programa “Solo por Hoy”, que conduce María Julia Oliván y se emite por Radio Belgrano, editó el libro “Thrash: Relatos de la Argentina mediática”, en donde enumera hechos y anécdotas sobre aquellos referentes de la actualidad bizarra televisiva y junto a el nos adentramos a este fantástico mundo clase B.
“Este libro se fue haciendo con los años. Es una recopilación de notas que fui haciendo más cosas que escribí exclusivamente para este trabajo. Desde mi llegada a Rolling Stone en 2005 fuimos abordando personajes desde la óptica de la revista; comenzamos esa vez con Nazarena Vélez y llegamos a este número con Amalia Granata”, sostiene el autor en diálogo con La Vereda.
¿La personalidad de estos personajes bizarros te ha brindado como periodista otra perspectiva para realizar las entrevistas?
No lo pienso desde el periodismo, me interesó el relato. Sí me interesó el lenguaje y lo que el personaje tiene que decir. Mi perspectiva real fue el asombro, lo que se pueda armar con la persona que tengo adelante. Me sorprende el hecho que en la pantalla suceden cosas que no deberían estar pasando, como ver a Ricardo Fort en casi todos los canales. Eso me asombra, es raro. Y es una instancia anterior al disgusto o a la aprobación. Estamos ante un acontecimiento que en la lógica no debería estar pasando y digo Fort por citar un caso solamente.

¿Te sorprendieron realmente o recibiste lo que fuiste a buscar?
Yo trato de ir “virgen”, sin una mirada previa. Quiero ver que hay ahí de real, no quiero tener una referencia de ese personaje, deseo que simplemente ocurra lo más libre posible yendo al encuentro con un perfil desprejuiciado. Insisto en esto: si tuviera una mirada previa, sería muy difícil asombrarme.
¿Hay alguna manera de entender a la llamada “Televisión Basura”?
Lo que yo llamo Thrash en el libro ha ido expandiéndose por alguna razón. Antes era la farándula y elegías o no ver a Lucho Avilés. Si lo mirabas te enterabas de todo y si no lo veías, no. Ahora es más difícil, casi que imposible, que eso ocurra. Elijas o no verlo, te vas a enterar. La diferencia es el tipo de consumo y ese es el primer dato para entender a la televisión de hoy, incluso excede la programación. Hubo un ensanchamiento y vas a encontrar a estos personajes en carteles, publicidades, en fin, todos lados.
¿Existe la caracterización dentro de la clase mediática?
Totalmente. Dentro de este universo hay distintas “subespecies”. Hay muchas diferencias de procedimiento y de clase, por citar casos, no es lo mismo “Amigacho” y Zulma Lobato que Ricardo Fort o “La Mole” Moli. Trabajan en distintos segmentos, con otras herramientas y recursos. Mismo el nuevo travesti que canta temas de Pappo; eso se ha transformado en un subsuelo de Thrash. Antes el piso era el programa de Anabela Ascar en Crónica TV y no había nada más debajo de eso. Ahora sí. Existen infinidades de categorías, pero todas conviven en el mismo universo.
Alejandro Seselovsky sabe lo que dice. Conoce muy bien a la gran mayoría de las “celebridades” de turno, pasó horas junto a ellos y eso se ha visto reflejado en el libro. Este trabajo es una de las mejores explicaciones que se puede encontrar para entender esta nueva filosofía televisiva y puede además, brindar un concepto más amplio acerca del mundo bizarro. “Creo que Ricardo Fort es el mejor chiste de la televisión en muchísimo tiempo. Es una broma que para mi no tiene peligrosidad al revés del discurso progresista que lo condena porque muestra “pornográficamente” sus Rolls Royce. Es mucho más peligrosa Luciana Salazar que él”, sostiene y argumenta que la blonda vedette “se vende como un modelo real. Su ideología de la belleza es eso que está ahí adelante y es tan o más monstruo que Fort por la manera que ha intervenido su cuerpo. Ella es veneno puro en pantalla”.
¿Es más grave que sigan apareciendo este tipo de celebridades o que la gente no pueda parar de verlos en pantalla?
No creo que nadie no pueda. Escucho gente que dice “no puedo parar de mirar”, como culpándose. Debemos hacernos cargo y afirmar que nos gusta mirar esta tele, de otra forma no hubiera crecido tanto en los últimos años. Es una simple cuestión de mercado, cuanto mayor es la demanda, más grande es la oferta.
La gente suele decir que no mira esto o aquello, que no sabe quien bailó en Tinelli y después el ráting demuestra lo contrario. ¿Acaso da vergüenza decir que se mira tele basura?
Si, es vergonzante. Digamos que queda más lindo si se mira el Canal Encuentro por ejemplo; brinda una mejor prensa de uno mismo. Pero en Argentina nadie votó a Menem y ganó... ¡dos veces y otra en primera instancia! Creo que no tiene muchas vueltas, si la TV creció de esta manera es porque encontró un rebote en la gente, sino a nadie le interesaría. Además es redituable para los productores por un tema de costos. El precio de hacer ficción es altísimo por eso lo traes a Jacobo (Winograd) 10 minutos y el solo te aguanta el programa, pero me parecería un tanto mezquino explicarlo solo por ahí. Es un tema que merece una mayor profundidad. Es más por el lado de la gente, de una batalla cultural perdida que indica lo que consumimos.
¿Hubo un antes y un después de Mauro Viale?
En realidad creo que ha existido un antes y un después de unos cuantos. Así como en su momento estuvieron Mancera (Nicolás “Pipo”) o Badía (Juan Alberto) también hay que mencionar a “Indiscreciones” o “ZAP” (NdR: conducidos por Lucho Avilés y Macelo Polino, respectivamente). Mauro ha sido uno de los grandes creativos en este rubro. Por ejemplo, él ha puesto al travesti dentro del paisaje de la televisión. Lo agregó al mediodía, en un lugar espantoso, claro. El preparó al personaje que después, cuando aprendió a usar los cubiertos, se sentó en la mesa de Mirtha Legrand.
Marcelo Tinelli tiene la producción y los medios necesarios como para animarse a otro tipo de producto sin embargo siempre es lo mismo. ¿Ha tenido un aporte importante en la pantalla?
Lo que sucede es que cuando él sale de su faceta de conductor, sus productos fracasan, como ahora lo hace “Soñando por Bailar”, que ha perdido su batalla estrepitosamente con “Gran Hermano”, midiendo menos de 10 puntos. Tinelli es el gran hacedor, el que conduce este circo, pero tampoco puede hacer todo lo que quiera. Sí se ha convertido en la gran aspiración mediática. Por ejemplo Zulma Lobato “canta” “Hasta Tinelli y el Maipo no paro”, se ha convertido en la meta de la gran mayoría.
¿Da para más la televisión basura o ya ha tenido un límite?
No, creo que siempre la lógica de esto es la de llevar todo un pasito más allá, “superándose” día tras día. Con Ricardo Fort se rompieron muchos límites, por ejemplo, cuando en su cásting de novias en Showmatch Tinelli le pidió a una de las chicas que abriera su boca para contarle los dientes. Ahí ya se pasó una barrera. Esto es medio cocainómano, porque al igual que la droga, la televisión te pide más.
Con un menú televisivo tan amplio, ¿ves una continuación en tu trabajo?
Sí, muy probablemente habrá un “Thrash 2”. Creo que es un terreno que aún tiene cosas por explorar. Debo juntar un par de excesos de límites más y además hay retratos por hacer que no salieron en este libro, como Silvia Süller, Moria Casán o Jorge Rial, entre muchos otros.

La gran fiesta de la familia



El Deportivo Berazategui, la institución más importante del distrito, celebró sus 94 años con un evento para el recuerdo.

Es una de las entidades más significativas de la ciudad y si bien lleva el nombre de Deportivo Berazategui responde mejor al apodo de “Depor”, bien ganado por su relación con el barrio y la familia. Por ese motivo no fue nada raro ver tanta cantidad de gente reunida para celebrar sus 94 años.
Nacido un 16 de abril de 1917, gracias a la inquietud de un grupo de amigos que deseaban participar de la Liga de Fútbol, el Deportivo fue creciendo hasta convertirse en la realidad de hoy: un punto de encuentro casi obligatorio para todos los vecinos que deseen practicar alguna actividad o bien ser parte de un nutrido grupo de amigos, como bien les gusta señalar a sus directivos.
Miguel Ángel Arrúe es el presidente de la Institución desde hace ya 18 años y tras el evento, que incluyó muestras de todos los deportes que allí se practican, explicó que “es un día de alegría. Estoy contento por el hecho de haber cumplido con una noche en familia, donde todos colaboraron, chicos, profesores, más el gran trabajo de Sergio Esperguin, nuestro coordinador deportivo”.
El directivo se muestra emocionado, el evento fue grande y todos participaron por eso se encargó de remarcar que “el club es mi vida, hace 63 años que soy socio y tengo esa misma edad. Cuando nací a mi padre solo le faltaba marcar la cruz en el casillero de sexo correspondiente para poder tener el carné en la mano” y por otro lado agregó que “son jóvenes 94 años. Este club se renueva permanentemente y ve como las generaciones van cambiando, trabajan a la par nuestro y quieren al club como propio”.
Cuando uno llega al Deportivo Berazategui se encuentra con un lema, “el Club de la familia” y sobre eso Arrúe explicó que “la gente responda muy bien y no solo de esta ciudad. Vienen desde Quilmes, Ezpeleta, Florencio Varela. Tenemos una gran cantidad de socios que disfrutan de las instalaciones del club. Ellos suelen decir que el corazón de la ciudad late en el Depor. Y eso es verdad, estamos en el centro, a 5 minutos de todo y prestamos un servicio para toda la comunidad”.
Más allá de los festejos, el presidente se encargó de remarcar proyectos para este año en los que se destacan las “clínicas, como la que dará el medallista olímpico en natación José Meolans. Esto no es común en un club de barrio y esto no solo nos enaltece como institución sino también como ciudad. Por otro lado también pretendemos la creación de un polideportivo a raíz del avance de las disciplinas que nos requieren mayor espacio y poder albergar 16 actividades de salón”.
Por otro lado, el Coordinador de Deportes del Club, Sergio Esperguin mostró su satisfacción luego del aniversario comentando que “fue mucho el trabajo en la previa, pero se hizo en conjunto con todos los profesores, con la novedad de presentar nado sincronizado. Uno lo disfruta viéndolo sentado y tranquilo, ahí se ve la calidad de profesionales que tenemos y esa es la razón por la cual el club sigue creciendo”.
Esperguin también se encargó de resaltar que “como profesor de educación física existe una realidad y esa es que uno disfruta al ver a un chico haciendo deporte. Acá ellos vienen, disfrutan y crecen. Para muchos este lugar es su segundo hogar y eso nos llena de alegría”.